Se inició ejecutando la bandónica, instrumento de formato parecido al bandoneón pero con sonido similar al acordeón, que aprende a tocar solo. Luego adquiere conocimientos de piano y más tarde el bandoneón.
En 1936 se incorpora al conjunto “Los Hijos de Corrientes” que dirigía el ya desaparecido maestro Don Emilio Chamorro, otro auténtico pionero del chamamé en Buenos Aires.
En el año 1942 en compañía de Don Ernesto Montiel, otro grande de nuestra música, deciden formar un conjunto al que denominan ”Cuarteto Correntino Santa Ana” , binomio que dejará grabado en el disco temas antológicos. Cómo olvidar títulos como: “La Calandria", "Santa Ana", "Estancia Miraflor", "Nostalgia Guaraní", "Siete Higueras", entre muchos más.
Actuó con Ernesto Montiel hasta el año 1951, volviendo en 1956 para algunas presentaciones especiales.
Desvinculado del Cuarteto Santa Ana armó su propia agrupación que en algunas oportunidades fueron tríos, cuartetos y quintetos. Compartió grabaciones y escenarios con músicos de la calidad artística de Tránsito Cocomarola, Samuel Clauss, Emilio Chamorro, Emeterio Fernandez, Pedro de Ciervi, Antonio Niz, Lorenzo Valenzuela, Ruben Miño, Julio Luján, Alejandro Barrios, Miguel Repiso, Luis Ferreyra, José Cejas, Hermanos Zamudio, Hermanos Navarro, “Nene” Fernández, Pascasio Ubeda, Héctor Chavez, Julio Lorman, el Dúo Gómez –Florentín y Roberto Galarza, entre otros.
Isaco Abitbol tuvo una personalidad muy reconocida por su permanente actitud de bondad, de entrega absoluta en la amistad, de la que ha hecho un verdadero culto.
Participó en muchas grabaciones ayudando a otros conjuntos o en conjuntos de amigos sin que figure su nombre muchas veces en los rótulos de los discos.
En la década del 70, formó el recordado “Trío de Oro” junto al bandoneonista Julio Lorman y la guitarra y la voz de Roberto Galarza, dejando varios discos larga duración como prueba de su imponderable calidad artística. En su trayectoria musical ha obtenido tres “Discos de Oro” con títulos como "La Taba", "La Zurda", "Paraje Bandera Bajada", "Serenata del Amanecer", "La Yapa", "El Lamento", "Estampa Correntina", entre otros.
Su discografía es inmensa. Grabó durante más de ocho años con el Cuarteto Santa Ana. Registró veintiún discos larga duración en los sellos ODEON y MUSIC HALL con su propio conjunto. Compuso más de 150 temas por lo que se hizo acreedor al “DAM” (Derecho Autoral Minimo) que otorgaba SADAIC a aquellas figuras con una trayectoria permanente y registraban consecuentemente sus obras musicales. Fue en realidad un verdadero patriarca de la música correntina. Su presencia en los escenarios de festivales mereció la aclamación popular ganada a través de años de labor y entrega total a la música de su tierra.
Merecedor de todos los homenajes que en vida ha recogido, fue quizás el músico chamamecero por excelencia, portador de las virtudes más genuinas: intérprete, compositor, hombre de bien y gran amigo. Por todo eso y por su riquísima trayectoria, recibió el reconocimiento por parte de los organizadores del festival que se realiza todos los años, la imposición de su nombre y apellido al escenario mayor en Villa del Rosario-Chajarí (Entre Ríos). También una calle de la localidad de Gobernador Virasoro, en la provincia de Corrientes lleva su nombre.
Sus últimos años fueron de un constante trajinar por mil escenarios, festivales, peñas, bailantas, radio y televisión. Junto a Roberto Galarza realizó innumerables presentaciones. Posteriormente integró de común acuerdo con Antonio Niz (guitarra) y Rubén Miño (acordeón), el Trío "Pancho Cué". Actuó y dejó grabado un trabajo musical que fue su testamento. Su última serie de temas grabados demuestra que su talento, su genial toque bandoneonístico estaba intacto. Un grupo de ángeles lo conduce al cielo un 6 de Marzo de 1994.
Muchas gracias por levantar en tu blog un artículo que escribí para este portal que es un nidito chamamecero con mucho sentimiento.Reconoci la foto que le saque a la revista de mi madre y sinceramente me gusta muchísimo el avance de tu sitio.FELICITACIONES Y BUEN AÑO CHAMAECERO.
ResponderBorrarEn Alvear, su tierra natal, la calle principal lleva su nombre, ademas de una estatua suya con la calandria en el hombro y el bandonin en la mano. Felicitaciones
ResponderBorrarPablo, mi viejo me contaba como tocaba don isaco, en los bailes, no podía faltar una lata de vino al lado para poder tocar!
ResponderBorrarUn abrazo y felicidades!